Después de un proceso de separación o divorcio, cuándo los hijos menores acaban el cole puede suponer un motivo de conflicto entre los progenitores por que se tienen que repartir el tiempo que el menor va a estar con cada uno de ellos durante sus vacaciones escolares. En estos casos, lo ideal es que ambos progenitores tengan buena relación entre sí, pero no siempre se da esta situación y puede suponer un verdadero quebradero de cabeza para los padres.
En la mayoría de los casos este reparto se encuentra establecido en el Convenio Regulador o en la sentencia de separación o divorcio. No obstante, siempre se podrá variar el tiempo que pasen los progenitores con sus hijos en verano, siempre que lleguen a un acuerdo. Estas opciones pueden ser algunas formas de repartir las vacaciones de verano:
- Reparto semanal: es el método más utilizado entre los progenitores que ostentan la custodia compartida, puesto que no suponer ninguna modificación respecto al resto del año.
- Reparto por quincenas, repartiendo así los meses de julio y agosto en cuatro periodos.
- Reparto mensual: un padre en julio y el otro en agosto. Esta forma de distribución de las vacaciones suele alternarse años tras año; por ejemplo, la madre elige en los años pares y el padre en los años impares.
Ahora bien, si en la sentencia o convenio ha quedado alguna duda cómo han quedado los días de las vacaciones fijados, es mejor que los progenitores busquen una solución entre ellos puesto que en caso de conflicto, habrá que acudir a una mediación familiar o pedir judicialmente una modificación de medidas para que el Convenio especifique cómo repartir los días que no se han fijado de forma expresa anteriormente.
Independientemente de los días de distribución de las vacaciones, es muy importante que cada progenitor avise al otro de dónde se va con sus hijos de viaje y siempre tendrá que facilitar el contacto entre ambos. La forma de comunicación también deberá pactarse entre los cónyuges, siendo recomendable incluir este aspecto en el Convenio Regulador para evitar futuros problemas. Si todo queda estipulado y uno de los progenitores pone problemas con la comunicación, se podrá acudir a la vía judicial.
También es importante fijar en el convenio regulador cómo se vuelva a la normalidad con los menores cuando hayan acabado estos sus días de vacaciones. Lo más habitual es volver a la normalidad a partir del primer fin de semana después de las vacaciones y será el progenitor que no ha disfrutado de los niños en el último periodo los que los tenga el primer fin de semana. Ahora buen, es posible que se haya acordado que el régimen de visitas no se suspenderá en el periodo de vacaciones.
Las preguntas más habituales de nuestros clientes sobre las vacaciones escolares tras el divorcio son:
- ¿PUEDO LLEVARME A MIS HIJOS DE VACACIONES AL EXTRANJERO? En principio si, pero es fundamental tener una autorización del otro progenitor y ante la imposibilidad de obtenerla, se podrá solicitar al Juez su autorización.
- ¿DURANTE LAS VACACIONES TENGO QUE SEGUIR PAGANDO LA PENSIÓN DE ALIMENTOS? La pensión de alimento es una obligación que hay que pagar si o si todos los meses del año. Por ejemplo, si se establece que las vacaciones de dividirán por periodos mensuales, el obligado al pago de la pensión tiene que pasarla también ese mes aunque los menores se encuentren todo el mes con el o ella
En resumen, como abogada especializada en derecho de familia, siempre te voy a recomendar que llegues a un acuerdo con tu ex. Aunque es la situación ideal, no siempre es posible.
Si tienes algún problema a causa de las vacaciones de tus hijos tras el divorcio o separación, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
